El Poder de la Mente

10 formas de mejorar la creatividad

1. Insiste en darte tiempo para soñar

Prográmalo, si es necesario. Durante ese tiempo no permitas deberes o molestias. Esta vez deja a tu mente flotar libremente, sin ataduras ni tareas a realizar. No pienses en lo que vas a hacer cuando este tiempo se haya acabado. Déjate mirar por la ventana, mirando fijo en las nubes y soñando despierto.

2. Sé curioso

Pregúntate ¿Para qué? ¿Cómo? ¿Por qué? No aceptes respuestas fáciles si no tienen sentido para ti.

3. Ignora la tradición y las costumbres

Sólo porque algo siempre se ha hecho así o se utiliza para ese propósito, no significa que las cosas no puedan cambiar.

4. Juega contigo mismo a un juego

O con otros, para tratar de encontrar la mayoría de los usos que no sean los obvios para artículos cotidianos como clips, ladrillos o cualquier cosa que se te ocurra. Esto extenderá y desarrollará tus músculos de creatividad.

5. Pregunta: "¿Qué pasaría si…?"

Elige uno de los aspectos de una situación ordinaria e imagina lo que cambia si de los aspectos fuera diferente. Sigue esto a través de todas sus implicaciones.

6. Lee ciencia ficción

Permítete sumergirte en los mundos que representa. Contempla las cosas imposibles y los universos paralelos. La reina de corazones de Alicia aconsejaba creer una cosa imposible cada día antes del desayuno. Era un buen consejo.

7. Acepta tus ideas iniciales sin hacer juicios

Dales tiempo para crecer y desarrollarse antes de probarlas. Las mariposas que acaban de salir de las crisálida tienen alas mojadas y arrugadas. Dales tiempo para desarrollarse antes de decidir si pueden volar. Permítete la misma libertad.

8. Acepta riesgos

Está bien estar equivocado. Einstein dijo que podría tener noventa y nueve ideas que estaban equivocadas antes de llegar a la que tenía razón.

9. Disfruta del proceso de creación

No te enfoques en el resultado. El secreto y el éxtasis de la creación están en sentirse en el flujo, perderse en el proceso. Si constantemente pierdes el ritmo para comprobar cómo va el resultado final, posiblemente estés subvirtiendo el proceso y haciendo daño a tu creación.

10. ¡Sigue adelante y hazlo!

No esperes el momento perfecto, pues no va a llegar. Los pintores raspan la pintura una y otra vez. Los escritores escriben y borran continuamente. No esperan hasta que puedan hacerlo a la perfección antes de que comenzar. Tú no necesitas doce lápices afilados y perfecto silencio antes de poner la pluma a escribir en el papel. Recuerda que Shakespeare escribió en una época en que toda la familia se sentaba en la misma mesa y se compartía la misma lámpara de aceite. Es poco probable que tuviera un estudio separado o esperara a que la familia se hubiera ido a la cama para poder escribir tranquilo.

Sobre el autor: Diana Robinson, Ph.D., Desarrollo Personal y Coach de Negocios
Contacto en Diana@ChoiceCoach.com o en la web en http://www.ChoiceCoach.com